La movilidad eléctrica también se está extendiendo en el mundo empresarial. Nuevas flotas de cero emisiones, vehículos eléctricos alquilados para ejecutivos y representantes, puntos de recarga en aparcamientos de empresa. Hay muchas formas de adaptarse a la revolución eléctrica actual y muchas razones diferentes para hacerlo: desde el deseo de reducir la huella de carbono hasta la mejora de la imagen, desde el deseo de ayudar a implementar la transición hasta lograr ahorros concretos en costes y recursos.

MÚLTIPLES BENEFICIOS 

Las ventajas de seguir una política de movilidad eléctrica corporativa son numerosas y se distribuyen entre los diferentes actores del sistema empresarial.
Para las empresas, es una inversión que proporciona un ahorro energético significativo en cuestión de pocos años. “Solo teníamos que sustituir nuestra furgoneta por un vehículo eléctrico”, afirma Ugo Cuncu, fundador del evento Eneroad, y uno de los pioneros de la movilidad italiana, “para reducir el coste del vehículo, con el mismo número de kilómetros recorridos, en unos 5000 € al año. Dinero que podemos emplear en otras cosas”.

Pero los empleados también se convierten en beneficiarios de una movilidad alejada de los combustibles fósiles.
Ellos conocen bien esto en Sofidel, un fabricante de papel para usos higiénicos que implementó una flota de carsharing en 2017 al comprar 4 coches eléctricos que los empleados pueden usar, incluso durante su tiempo libre.
Pero no solo eso: gracias al acuerdo con la empresa de automoción Nissan, los empleados reciben ventajas específicas al comprar vehículos eléctricos y pueden cargar su vehículo gratis durante un año en uno de los nueve puntos de recarga instalados en dos instalaciones. “Y esto, señala Luigi Lazzareschi, director general del Grupo Sofidel, “es una forma de mirar hacia el futuro mediante el desarrollo de la concienciación sobre el uso de medios y sistemas de colaboración sostenibles desde el punto de vista medioambiental que son más eficientes y coherentes con las necesidades sociales actuales”.

PUNTOS DE RECARGA ELÉCTRICA EN APARCAMIENTOS DE EMPRESA

Pero los beneficios de la movilidad eléctrica en las empresas provienen de la instalación de puntos de recarga en los aparcamientos de la empresa. Además de la capacidad de aprovechar el servicio de carga de su vehículo, con lo que se obtiene el mayor beneficio posible de su visita, los visitantes y los clientes tienen la percepción de estar en una empresa de vanguardia que se preocupa por el medio ambiente y por sus trabajadores.

Para finalizar, ¿la instalación de puntos de recarga en su empresa es más cómoda en términos de ahorro, apoyo a ciertos estilos de vida o mejora de su imagen? “Creo que es la combinación correcta”, concluye Ugo Cuncu. “Siempre hemos animado a nuestros clientes, a nuestros proveedores y, en particular, a nuestros empleados, no solo a cargar sus coches eléctricos en nuestras instalaciones, sino incluso a usar vehículos eléctricos corporativos para ir a casa y mostrarlos a tantas personas como sea posible. El ahorro es evidente; los empleados terminan compartiendo la importancia de la sostenibilidad porque la experimentan en primera persona y beneficia a la imagen. Pero todo esto sucede solo si hay coherencia y lealtad. Solo si los clientes perciben esta continuidad desarrollarán una relación de escucha y confianza”.

Un enfoque integrado de la movilidad eléctrica en las empresas también es una potente palanca para mejorar los indicadores en los informes de sostenibilidad. La menor cantidad de CO2 emitida a través de una movilidad más sostenible ayuda a reducir uno de los costes más penalizados en la sostenibilidad medioambiental de las empresas. Esto es confirmado por E.ON, empresa europea de energía renovable, que ha lanzado un innovador experimento de intercambio para motivar e involucrar a sus empleados hacia una nueva forma de viajar, obteniendo beneficios al reducir las emisiones de_CO2 .
Mediante la iniciativa Moving@E.ON, compartiendo internamente vehículos eléctricos, en 1 año los empleados evitan 16 toneladas de emisiones de_CO2, viajando un total de más de 100.000 km, de forma totalmente sostenible, con los 5 vehículos eléctricos disponibles.

Una elección de “ganar ganando” que funciona para todos, especialmente para el medio ambiente. 

Andrés Berta